Este día, en el marco del Día Mundial sin Tabaco, el Fondo Solidario para la Salud (Fosalud), inició la divulgación de una campaña de sensibilización y concientización sobre la prevención y los riesgos que ocasiona el uso de dispositivos electrónicos.
“No caigas en el engaño, vapear es tan dañino como fumar“, es el mensaje que este año se estará promoviendo entre los adolescentes y jóvenes, quienes son los más propensos a experimentar con este tipo de productos perjudiciales para la salud.
A pesar de los esfuerzos en salud pública para reducir su prevalencia, la industria del tabaco ha innovado con la introducción de los cigarrillos electrónicos o vapeadores. El engaño del vapeo radica en la percepción errónea de que es una práctica segura o menos perjudicial que el consumo de tabaco tradicional.
No obstante, la realidad es que vapear implica la inhalación de aerosoles que contienen sustancias tóxicas y potencialmente dañinas para la salud, incluyendo la nicotina, una droga altamente adictiva.
De acuerdo con diferentes estudios, vapear afecta diferentes órganos como el cerebro, pulmones y corazón. Entre los daños neurológicos que ocasiona, la nicotina hace que el desarrollo neurológico sea deficiente en adolescentes y en jóvenes al deteriorar la función cerebral, que haya déficit de aprendizaje, deficiencia de memoria, adicción y dependencia cada vez mayor al usar los dispositivos.
Sobre los efectos pulmonares, expone a los consumidores a sustancias químicas tóxicas y partículas metálicas como el plomo, el cromo o el níquel, formaldehido, acroleína y acetaldehído. Estas sustancias ocasionan cáncer pulmonar, de lengua, paladar y otros tipos de cáncer. Además, provoca fibrosis pulmonar y Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica.
En cuanto a los efectos cardiacos, las sustancias contenidas en estos dispositivos aumentan la frecuencia cardíaca y presión arterial ocasionando: ceguera, infartos cardiacos, insuficiencia renal e impotencia sexual masculina.
Según datos preliminares de la encuesta Nacional de Alcohol y Tabaco que será presentada por Fosalud en las próximas semanas, más de 50 mil salvadoreños consumen cigarrillos electrónicos o vapeadores y que de estos el 76.2% lo consumen para dejar de fumar.
“Es un error pensar que el cigarrillo electrónico o los vapeadores son menos dañinos para la salud que los cigarrillos convencionales. Contamos con suficiente evidencia científica que nos demuestra que estos dispositivos son tan dañinos como los cigarrillos” puntualizó el Dr. Josué García, director en funciones de Fosalud.
La misma encuesta también apunta que la prevalencia tabaco fumado en población de 18 años a más es del 7.4%